MARÍA VICTORIA RONCONI

(Argentina)

 

 

LAS COSAS MÁS AMADAS

 

            De vez en cuando...

un tiempo de nostalgia llega

me busca, me alcanza y se queda.

Se instala en mí,

y yo vuelvo.

 

Me aparto de lo real y cotidiano

porque a mi memoria

le crecen gigantescas alas y retrocedo.

 

Porque la nostalgia es como un espejismo

en el que puedo contemplar

las cosas más amadas.

 

Ella trae consigo

rumores de voces pasadas

de costumbres de vidas,

que ya se fueron.

 

¡Casa Paterna!

¡Qué hermoso era

el rectángulo de tu cielo

casi negro como la noche,

con su madre luna

luminosa y durmiendo

y sus hijas las estrellas

imitándola en su sueño!

 

Serenata de grillos en los canteros

y de comparsas a lo lejos,

noche de aperitivo y refrescos

antes de la hora de la cena.

 

¡Te añoro patio querido!

de baldosas coloradas,

con enormes macetones

de brincos y pensamientos

e intercalando tinajas

con hojas de salón y helechos.

Azahares que año tras año

perfumaban el espacio,

vistiendo de gala el naranjo

y también el limonero.

 

¡Casa Paterna!...

oigo el murmullo de ratos viejos

melancólicos y placenteros

ahora que estoy tan lejos

en la distancia y el tiempo,

son tantas las veces que pienso:

 

que jamás he vuelto a ver,

un cielo más lindo que aquel:

¡El de mi Provincia!

 

 

UN VERANO QUE CULMINA

 

Hoy gime la rosa enamorada

por el ruiseñor que ha partido,

que rumbo al trópico se ha ido

omitiendo la pena de su amada.

 

Llanto que nacido en la alborada

se asemeja al húmedo rocío...

que por un ave errante del estío

hoy derrama la rosa apasionada.

 

Cambio de clima en el Edén florido

ya con su follaje de pájaros vacío,

selecto paraíso de trinos invadido

que lejos volaron para evitar el frío,

 

pues marzo arremete en su designio

de hojas amarillas en remolinos...

de vientos que azotando los caminos

le anticipan al otoño su destino.

 

Y exánime el verano en su agonía

intenta postergar las despedidas

procurando con su tórrida manía,

perpetuarse para el resto de los días.

 

Acerca de...

Nacida en Entre Ríos y residente en la Ciudad de PILAR (Buenos Aires), MARÍA VICTORIA RONCONI participa en distintas agrupaciones vinculadas al quehacer literario, entre ellas, el M.E.P.P. (Movimiento de Escritores del Partido de Pilar); el Círculo de Poetas de Morón, el Grupo Reencuentro, cuya sede actual es la Academia del Lunfardo y el M.O.A.R. de Pilar.

Hemos tenido la satisfacción de leer sus creaciones tanto en Poesía como en Cuento en No me olvides, su primer libro, en Torrencial, Tarde Celeste, y El Naufragio del Sol, Selecciones de Cuento y Poesía, así como en las plaquetas No me olvides, Inspiración y Flores Silvestres.

 Distinguida con una Mención en Cuento en el Segundo Concurso organizado por la revista Redes de Papel (Buenos Aires), MARÍA VICTORIA RONCONI, es frecuente colaboradora de dicha publicación, así como en Perfiles de Morón, Alas del Alma, Provincia (Córdoba), periódico Informando y otras.

            Es un placer presentar ahora, nuevamente su decir poético, todo un despliegue de perfume, color y emoción.

 

r Principal  rLa Página de Carmen   rEl Naufragio del Sol   rAutores de El Naufragio del Sol  rVenta de libros  rLink de interés